08 diciembre 2008

La guerra de Osetia

Traducción del artículo publicado en The Independent, publicado en Inosmi.

(Mary Dejevsky, 12 noviembre 2008)

Gracias Señor por la crisis financiera, piensan ahora en el Departamento de Estado de los EEUU y el el Ministerio de Asuntos Exteriores de Gran Bretaña. Si no fuera por estas noticias económicas más graves para el mundo occidental, ahora habría estallado un nuevo escándalo en la prensa, y en este escándalo habría sido bastante más fácil encontrar un culpable. Se trata de las relaciones de estos dos países con Rusia y de la verdad de la guerra veraniega entre Rusia y Georgia.

Durante las últimas dos semanas en los médios de comunicación británicos y estadounidenses han aparecido una serie de informaciones y artículos en los que se ponen en duda una serie de suposiciones sobre esta guerra. La principal de ellas: que Rusia es culpable de esta guerra. Los periodistas de la BBC, el New York Times y la revista canadiense Embassy, así como muchos otros periodistas han acudido al lugar que fue centro del conflicto de Osetia del Sur para intentar establecer los hechos.

No aquellos "hechos" que la habilísima maquinaria de propaganda georgiana nos ofreció entonces, no aquellos “hechos” que sacaron a la superficie los especialistas en información del Kremlin. Intentaron establecer los hechos en base a los relatos de los testigos de los sucesos: los habitantes locales, el jefe militar local, y los escasos observadores desarmados enviados a esta tegión por la OSCE.

Los periodistas viajaron allí por separado y por distintas vías. Hablaron con distinta gente. Sin embargo sus conclusiones coinciden: Georgia llevó a cabo un desordenado ataque militar a la capital de Osetia del Sur, Tsjinvali. Entre los edificios a los que se disparó estaba el hospital: sus médicos resultaron heridos durante las operaciones.

Durante el tiempo del ataque georgiano, así como durante el tiempo de la llegada de los primeros refuerzos rusos coincide en su mayor parte con la versión inicial rua. Después de esto los rusos entraron en el territorio soberano de Georgia, con lo que obtuvieron una censura general. Como información general hay que añadir que Rusia retiró sus tropas del territorio georgiano no disputado de acuerdo a las condiciones del acuerdo establecido con la mediación del presidente francés Sarkozy.

Ahora ustedes podrían replicar, como lo hicieron desde el comienzo el Departamento de Estado y el Foreign Office, que no tiene importancia quién comenzó la guerra; las provocaciones se llevaban a cabo desde hace tiempo por ambos lados, lo principal era conseguir un alto el fuego. Ustedes añadirán, con toda seguridad, que aunque las acciones rusas en un principio estuvieran justificadas en algún grado, en conjunto no lo estaban, por utilizar una fuerza desmesurada y por reconocer a Osetia del Sur y Abjasia como estados independientes.

Sin embargo sí que tiene importancia, pues es muy importante saber cómo empezó el conflicto. Tiene importancia desde el punto de vista legar y moral. Influye en la manera en que valoraremos en el futuro a los países que guerreen entre sí. Sin embargo la vaguedad general y la falta de claridad de los comunicados oficiales de los EEUU y el Reino Unido crean la impresión de que la culpa es de Rusia, y Georgia es una pequeña pero valiente democracia a la que la malvada Rusia ha decidido aplastar. Esta versión recibió inmediatamente el reconocimiento general. Y a Moscú le resultó casi imposible negarla, puesto que era confirmada por todos los estereotipos existentes.

Pero ahora los EEUU y el Reino Unido no pueden alegar desconocimento de las circunstancias del comienzo de la guerra. Los observadores de la OSCE informaron de todo desde el comienzo, y entre estos observadores estaban dos oficiales experimentados del ejército británico.

Entonces, ¿por qué los portavoces británicos y estadounidenses son tan evasivos, por quéno quieren reconocer, ni siquiera creer lo que en realidad sucedió? ¿por qué el líder de los conservadores británicos, David Cameron, se lanzó a viajar a Tblisi para apoyar a Georgia como si fuera la indudable víctima? ¿y por qué el ministro de exteriores británico David Miliband en cuanto acabó la guerra pronunció un ardiente discurso en Kiev, reforzando la impresión de que la guerra empezó debido al supuesto afán jde Moscú de reconstruir su imperio?

¿Qué es esto, ignorancia? ¿O ceguera ideológica? Puede ser que decidieran no reconocer la poca confianza que inspiraba su protegido georgiano, para no desacreditar su proyecto de extensión de la democracia y el proselitismo entra las antiguas repúblicas soviéticas. Ahora, tres meses después de la finalización de la guerra, Miliband y los dirigentes estadounidenses se han visto forzados a denominar las acciones de Georgia “imprudentes”.

Pero los hechos dicen otra cosa. A comienzos de esta semana Gran Bretaña levantó discretamente su oposición al comienzo de conversaciones entre la UE y Rusia sobre el nuevo acuerdo de colaboración. Y era casi la única que se oponía a estas conversaciones, en señar de solidaridad con Georgia. Parece que este último resuello oficial contra Rusia ha pasado. Pero en Moscú el sentimiento de hostilidad y los malos recuerdos permanecerán mientras en Londres y Washington no reconozcan de qué manera tan errónea juzgaron la guerra entre Georgia y Rusia.

05 noviembre 2008

Encuesta: los rusos y Dmitri Medvedev

Entre el 10 y el 20 de octubre de 2008, el centro analítico de Yuri Levada (Levada Center) realizó una encuesta entre 1600 personas en 128 poblaciones de 46 regiones de Rusia. Las respuestas a las preguntas de esta encuesta se dan en porcentajes sobre el total de encuestados. El error estadístico no supera el 3%.

De los resultados de la encuesta se deduce que más de la mitad de los rusos (55%) tienen una impresión positiva de Dmitri Medvedev. Cerca del 60% apoya sus actos. Sin embargo cerca de la tercera parte de los encuestados dijeron que no saben lo suficiente sobre la actividad del presidente (a pesar de que se dedica al presidente la mayor parte del tiempo en las noticias de los principales canales e televisión). Algo menos del 40% de los rusos consideran que Dmitri Medvedev ejerce "una fuerte influencia en lo que sucede en Rusia". Las diferencias en la valoración de la actividad del presidente en distiontos grupos socio-demográficos se ven en la siguiente tabla.

Opinión sobre Dmitri Medvedev según grupos de edad o educación del encuestado


Total

Edad

Educación

18-24 años

25-39 años

40-59 años

55 años y mayores

Superior

media
especializada

media

menos
que media

¿QUÉ IMPRESIÓN LE PRODUCE DMITRI MEDVEDEV?

En general buena

55

56

58

51

54

57

55

61

50

En general mala

9

9

8

10

9

11

9

6

9

No sé lo suficiente sobre él

33

31

30

34

34

28

34

28

37

No constesta

4

3

4

5

3

4

3

5

4

¿QUÉ PUEDE DECIR SOBRE LA ACTIVIDAD DE DMITRI MEDVEDEV COMO PRESIDENTE DE RUSIA?

En general le apoyo

58

61

62

56

57

64

59

64

52

En general no le apoyo

7

8

6

8

7

8

7

7

8

No sé lo suficiente

29

27

26

31

31

20

29

27

35

No constesta

6

4

6

6

5

8

5

3

5

¿QUÉ INFLUENCIA EJERCE DMITRI MEDVEDEV EN LO QUE OCURRE EN RUSIA?

fuerte/ muy fuerte

37

38

41

38

31

39

34

42

34

media

41

43

44

37

39

43

42

43

36

débil / muy débil

13

8

8

16

16

12

13

8

15

No constesta

10

11

7

9

14

7

11

7

14

Opinión sobre Dmitri Medvedev según nivel económico y lugar de residencia del encuestado


Total

Nivel económico

LUGAR DE RESIDENCIA

no nos llega para la comida

nos llega justo para la comida

nos llega para la comida y la ropa

Podemos comprar sin problemas artículos de uso a largo plazo

Moscú

mayor de 500 mil

de 100 a 500 mil

hasta
100 mil

población

¿QUÉ IMPRESIÓN LE PRODUCE DMITRI MEDVEDEV?

En general buena

55

38

56

57

55

70

56

50

53

54

En general mala

9

14

8

8

12

8

11

9

9

7

No sé lo suficiente sobre él

33

43

33

32

28

13

31

38

33

36

No constesta

4

5

3

4

5

9

3

2

5

3

¿QUÉ PUEDE DECIR SOBRE LA ACTIVIDAD DE DMITRI MEDVEDEV COMO PRESIDENTE DE RUSIA?

En general le apoyo

58

43

60

58

64

69

60

52

57

60

En general no le apoyo

7

13

5

6

12

6

11

6

6

8

No sé lo suficiente

29

38

30

30

19

14

23

36

31

30

No constesta

6

6

5

6

5

12

5

5

7

3

¿QUÉ INFLUENCIA EJERCE DMITRI MEDVEDEV EN LO QUE OCURRE EN RUSIA?

fuerte /
muy fuerte

37

24

34

38

42

46

36

36

33

39

media

41

39

41

41

40

41

40

38

41

43

débil / muy débil

13

19

15

11

9

5

16

13

14

10

No constesta

10

18

10

10

9

8

8

13

13

8

12 julio 2008

Un pequeño salto temporal

Hoy aparece en El Pais una noticia sobre la reducción del suministro de petróleo ruso a la República Checa. Para colocarlo en su contexto de maldad rusa con los que quieren ser independientes, dice:

A pesar de que Rusia ha utilizado la creciente dependencia energética de los países europeos como elemento de presión, cortando el suministro a Ucrania tres días después de que el candidato que apoyaba para suceder a Leónid Kuchma perdiera las elecciones a finales de 2005. También mantiene cerrado el grifo para Lituania desde su gobierno vendiera una refinería importante a un comprador no ruso en 2006.

No hay más que recurrir a las hemerotecas para ver que entre la llegada al poder de Yuschenko y la crisis del gas entre Ucrania y Rusia no pasaron tres días, sino un año, y si quieres tres días más, ya que el primero de los hechos sucedió en diciembre de 2004 y el segundo en enero de 2006.

Supongo que la propaganda pasa de tales matices.

20 junio 2008

La clase media en Rusia

Publicado por el diario Trud el 04.06.2008. Recogido de la página del VTsIOM.

Durante los últimos 10 años la proporción de rusos pobres, a los que no les llega el dinero ni para comer, se ha reducido en 4 veces y ha bajado hasta el 7% de la población. El grupo más numeroso (51%) es el de aquellos que se pueden permitir comprar comida y ropa, pero aún no son capaces de comprar un televisor o un frigorífico.

Los sociologos del VtsIOM estudian la capacidad de compra de la población desde los años 90 y si compararmos los ingresos de los ciudadanos con los de finales de la década pasada se comprueba que es cierto que se vive mejor. Pero no con más alegrías. En 1998 sólo el 1% podía permitirse comprar un coche, apartamento, terreno. Este porcentaje sigue igual. Aunque en todos los demás grupos se han producido cambios sustanciales.

Una buena noticia: en los últimos 10 años ha crecido el grupo de los que están en disposición de alimentar y vestir a su familia. Una mala noticia: los éxitos de la mayoría acaban ahí. Apenas el 16% de los rusos pertenecen hoy día a la clase media, aunque el atributo “clásico” de la clase media, un coche, no esté al alcance de todos.

- Todo el asunto reside en una particularidad clave de nuestro comportamiento financiero, - aclaró a “Trud” el director general del VtsIOM, Valeri Fedorov. - Si la gente dice que les resulta difícil comprar un piso o un coche, no tienen la capacidad de comprarlo al contado. A pesar del desarrollo en los últimos años de mecanismos crediticios, los rusos no tienen aún la costumbre de vivir a crédito como, por ejemplo, los estadounidenses.

Los estadounidenses que ganan lo mismo que los rusos definen su capacidad de compra bastante más alta, en la capacidad de comprar un inmueble o un coche a crédito. Entre nososotros aún predomina la práctica de la acumulación: primero se reúne la cantidad necesaria y sólo después se va a comprar.

Basar este comportamiento totalmente en el “alma rusa” no es correcto. El hecho es que la cuarta parte de la población del país no pueda comprarse ropa nueva (es decir, se encuentre en el grupo de los pobres). Esto es más que lo que reflejan las cifras de la Agencia Estatal de Estadística. Recordemos que de acuerdo a su último informe, en comparación con abril del año pasado nuestros sueldos han crecido en un tercio y el crecimiento de los precios se ha doblado.

- Es evidente que la disminución del nivel de pobreza no lleva la velocidad que necesita el país, - dice Fedorov. - Uno de los grandes problemas es la inflación. En los últimos ocho meses ha vuelto a convertirse en la primera de las preocupaciones de la sociedad. Además, si antes los ciudadanos con ingresos tenían un buen instrumento para combatirla: el ahorro en dólares, ahora esta gente corre riesgos, porque el dólar cae y cada vez se puede comprar menos con él. La inflación se ha convertido en una amenaza frontal, que golpea a los pobres y a los ricos.